(Bilbao, Barcelona, Valencia, Madrid)
Hija de un campeón de acordeón y de una organista de iglesia, Shara Worden creció rodeada de música y pronto descubrió que su voz era un diamante en bruto. Estudió ópera, se fue a Nueva York, compaginó el estudio de Debussy con los conciertos de Antony And The Jonsons y Rebecca Moore, y definió una personalidad musical compleja a medio camino entre Puccini, Tricky y PJ Harvey.
Sufjan Stevens descubrió su brillo y la enroló como parte de los Illinoisemakers antes de verla volar en solitario con su primer álbum, “Bring Me The Workhorse” (2006). Pronto, Shara deslumbró al mundo con su fulgor. Versátil, teatral e imaginativa, ha experimentado con un cuarteto de cuerdas (que la acompaña en esta gira) en su segundo largo, “A Thousand Shark’s Teeth” (2008), una suerte de cuento musical ricamente instrumentado que parece reunir en un mismo cuarto a Maurice Ravel, Lewis Carroll y Tom Waits. Con este derroche de quilates, Shara Worden ha vuelto a demostrar que es una auténtica joya.
(texto facilitado por Judith Pascual)
No hay comentarios:
Publicar un comentario